Los carburantes y combustibles petrolíferos y derivados naturales constituyen en la actualidad el grupo mayoritario haciendo funcionar máquinas de toda clase.
Se define como carburante según la RAE, aquella “mezcla de hidrocarburos que se emplea como combustible en los motores de combustión interna.”
La mayoría de motores emplean carburante que podrá ser de gasolina o gasóleo. En otra línea existen otras fuentes de energía como las renovables, así como la nuclear.
Evolución en el uso de los combustibles en la naturaleza.
Existen muchísimos tipos de motores que han evolucionado según las necesidades. Los motores iniciales que se inventaron se basaron al comienzo en la energía de la naturaleza.
De esta manera se aprovechaba la energía del viento y la del agua. Aprovechar la energía del viento estaba sujeta a ciertos lugares en donde éste se producía de una manera más o menos frecuente.
Sin embargo, fueron los cursos de agua aquellos que proporcionaban una mayor regularidad en el aprovechamiento de esta energía.
A medida que las necesidades del hombre fueron evolucionando en el desarrollo de distintas actividades también se desarrollaron sistemas independientes en la obtención de la energía necesaria.
Por esa razón los motores evolucionaron también según su fuente de energía.
La definición de combustible según la RAE consiste en una “materia sólida, líquida o gaseosa que alimenta una instalación de combustión.” Básicamente lo que viene a decir es que se emplea una materia la cual se quema.
De manera natural existen en la naturaleza varias fuentes de combustible como por ejemplo la madera. Recoger y acumular leña fue desde siempre una tarea de gran importancia. La madera seca era empleada para calentarse en invierno, para cocinar y para tener luz en la noche.
Los carburantes y combustibles petrolíferos y derivados naturales. La madera y la resina como combustibles precursores.
El origen y uso del fuego por la humanidad se basó en el uso de la madera seca. Esta materia fue primordial para poder conservar el fuego.
Existen miles de tesis y teorías sobre el origen y usos del fuego por los primeros humanos. Se habla en esos textos de cómo se conservaba y generaba.
De una manera accidental sitúan esta fuente de luz y calor en los incendios que de manera fortuita eran producidos por la caída de rayos durante las tormentas.
Otra teoría sitúa su origen en las fuentes de lava volcánica que incendiaban todo a su paso.
De esta manera, empleando esas dos fuentes, era posible obtener fuego de manera ocasional. Sin embargo, su conservación estaba sujeta a grandes riesgos debido a que cuando se apagaba ya no había manera de volver a reactivarlo.
Sobre la producción intencionada de fuego seguro tuvieron que transcurrir muchos miles de años.
Según los expertos, la producción de fuego mediante combustibles sólidos como la madera, estuvo sujeto al empleo de herramientas como el sílex o la cuarcita cuando era golpeada entre sí para producir chispas. Esas chispas prendían hojas secas que se avivaban para prender la madera.
La resina: otro combustible de gran interés.
Desde aquellos primeros momentos de la humanidad hasta bien entrado el período Neolítico, se diversificó en el empleo de combustibles.
Uno de estos combustibles que se empleó fue la resina que también procede de la madera, en este caso en árboles vivos. La resina es una sustancia combustible.
La resina de pino tiene hidrocarburos, como productos derivados, solo que su origen es natural.
Esta materia se empleó con asiduidad para iluminar mediante teas espacios de caverna en los primeros momentos de la humanidad.
Posteriormente también se usó en otros espacios domésticos.
Los carburantes y combustibles petrolíferos y derivados naturales. Petróleo, brea, asfalto y carbón.
El petróleo también tiene hidrocarburos como productos derivados sólo que en este caso son de origen mineral.
Se cree que fueron de origen animal debido a la acumulación de sus restos en ciertos lugares. Cuando esas acumulaciones fueron de origen vegetal, con el tiempo, dieron lugar a grandes depósitos de carbón.
Se conocen desde muy antiguo depósitos de brea, asfalto, petróleo y carbón que entre multitud de usos fueron empleados como combustible.
Estos depósitos se encuentran de manera natural en la naturaleza. Su aprovechamiento ha evolucionado a medida que lo hacía la innovación técnica.
Usos modernos y diversificación: gas natural y alcohol.
A partir del siglo XVIII se produjo un gran cambio a nivel global en lo referente a las innovaciones técnicas.
Una de esas innovaciones fue el empleo de diferentes tipos de hidrocarburo como fuente de combustible.
Uno de estos hidrocarburos fue el gas natural. Existen varios tipos de gas natural como el metano, el etano, propano y butano. Cada uno de ellos tiene un poder calorífico distinto.
El gas se empleó como combustible para iluminar calles y también como carburante para accionar motores.
El uso de motores con combustibles como el alcohol fueron también una de esas innovaciones.
Existen varios tipos de alcohol, aunque el más empleado fue el etanol. El etanol es un hidrocarburo alifático que se obtiene mediante la fermentación de productos orgánicos. Estos productos pueden ser la uva, la caña de azúcar y el maíz entre muchos otros.
Los carburantes y combustibles petrolíferos y derivados naturales. Demanda energética actual.
El consumo cada vez mayor de combustibles para cubrir las necesidades de energía en las ciudades ha obligado al desarrollo de nuevas fuentes.
Por una parte, se han ampliado los pozos de extracción tanto de gas natural como de petróleo por todo el planeta. También se han ampliado los campos de extracción de otras fuentes de combustible como el carbón.
La extracción de crudo se emplea como combustible tras el proceso de refinado pero también para la elaboración de otras sustancias como el asfalto. El asfalto a día de hoy es crítico en la construcción de carreteras y por tanto en mantener y ampliar las vías de comunicación terrestre.
En una línea paralela se han desarrollado por otra parte nuevas fuentes de energía. Se han potenciado aquellas que eran experimentales y se han afianzado aquellas que ya funcionaban, pero estaban en un desarrollo temprano.
El aprovechamiento eólico ha sido una de las fuentes de energía renovable que más ha crecido. Le han seguido de cerca los campos de energía solar.
A diario se innova en nuevas maneras de lograr energía renovable.
Por otra parte, a nivel técnico se diversifica en cuanto a las maneras y modos de extracción para extraer combustibles de lugares más profundos.
También se optimiza al máximo el rendimiento en la elaboración de productos refinados que serán empleados como combustibles.