Los sistemas de videovigilancia en parking se presentan hoy día como un requisito de seguridad indispensable. Hace varios años eran todo un lujo al alcance de pocos. Estos sistemas persiguen una mayor seguridad de las personas en espacios determinados.
Los sistemas de video vigilancia en parking. Definición de seguridad.
La seguridad es aquello que proporciona protección sobre bienes y personas. Defender recursos valiosos es una de las funciones de la seguridad.
Proteger personas consiste en cuidar de que nada las afecte y permitir su normal actividad.
Esta función parte de garantizar todos aquellos recursos que las personas necesitan como el agua, el aire, el alimento, el transporte y la comunicación.
En esta línea se definen políticas medioambientales para que la vida en las ciudades sea posible y beneficiosa. Uno de estos ejemplos lo tenemos en la vigilancia de la calidad del aire que respiran sus habitantes.
La seguridad incluye lo que se conoce como seguridad ciudadana. En este marco se encuadra la protección de las personas de las mismas personas.
Existe todo un reglamento y legislación que vela por el cumplimiento de unas reglas de convivencia social. Dichas reglas abarcan desde relaciones familiares y vecinales, de convivencia cívica, así como laborales.
Para garantizar dicho cumplimiento en las últimas décadas se han dotado a las ciudades de unidades de vigilancia. Estas unidades consisten en cámaras de video vigilancia y grabación que se han extendido tanto en espacios públicos como domésticos.
Actualmente hay cámaras que graban en la calle, en centros oficiales, en puestos de trabajo, en comunidades y fincas vecinales, en casas privadas, así como en el interior de los vehículos.
En las carreteras y autopistas también se han extendido esta clase de ingenios para controlar matrículas y conductores.
Los sistemas de video vigilancia en parking. Garajes y aparcamientos.
Los sistemas de video vigilancia en parking están apoyados por la vigilancia presencial de personas. Estos operadores además de monitorizar las instalaciones pueden realizar comprobaciones in situ. Asisten a personas a las que ayudan en diferentes tareas y controlan el espacio perimetral.
Las cámaras graban por circuito cerrado de televisión todo lo que sucede y pueden estar conectadas a una centralita de apoyo que verifica la correcta vigilancia por otros operadores.
En otros casos este centro de control puede estar fuera del inmueble cuando no hay un operador físico.
Algunos aparcamientos hoy en día no disponen de estos sistemas. Sin embargo, en los últimos años debido al abaratamiento de la tecnología, estos sistemas se han extendido a prácticamente cualquier presupuesto y economía tanto de aparcamientos domésticos como comunitarios.
Los aparcamientos más grandes siempre han sido los primeros en integrar cámaras de seguridad en sus instalaciones. En la actualidad el número de cámaras en este tipo de instalaciones se ha multiplicado.
Sistemas de tecnología asociada.
Junto a estos sistemas también han proliferado tecnologías asociadas.
Otros elementos que se han incorporado a los garajes han sido las comunicaciones wifi y centralitas amplificadoras de telefonía. De este modo el usuario está conectado totalmente a sus dispositivos de telefonía móvil y las centralitas de vigilancia tienen una mayor autonomía y alcance.
Una de estas tecnologías consiste en el reconocimiento facial. Se trata de una tecnología muy reciente basada en la digitalización del rostro de las personas.
Su función es clave en ciertos dispositivos de seguridad los cuales se accionan frente a la persona autorizada.
A un nivel mucho más doméstico encontramos el reconocimiento facial en dispositivos móviles como teléfonos. En vez de emplear una clave de acceso el rostro del usuario es la llave de acceso.
En los garajes con usuarios registrados el sistema funciona de la misma manera. Se trata de un mecanismo de identificación que se está implantando en vehículos de turismo.
Igual ocurre con el reconocimiento de voz. Dado que la voz es única puede emplearse con el mismo fin que el reconocimiento facial.
El uso de la huella dactilar ya se emplea desde hace muchos años con multitud de funcionalidades. Con este método de identificación se podía tomar un ascensor a determinadas plantas e incluso firmar documentos.
Todas estas innovaciones tecnológicas se están integrando con sistemas de inteligencia artificial y sistemas predictivos. Su fin, en principio, es mejorar la vida de las personas.
Los sistemas de video vigilancia en parking. Ventajas.
Las ventajas de estos sistemas de video vigilancia son enormes.
Cuando se produce un accidente de tráfico, por ejemplo, es muy necesario saber qué ha ocurrido y determinar los hechos. Una cámara que lo haya grabado es un buen comienzo para aclararlo.
Esa es una de las razones por las que ha proliferado la venta de cámaras integradas en vehículos turismo, así como de transporte. Las grabaciones pueden arrojar luz sobre los hechos y determinar la responsabilidad de los mismos.
En la actualidad los trenes de pasajeros incorporan cámaras de vigilancia en los vagones. También están presentes en las cabinas de locomotoras de dichos trenes, así como en las de trenes de mercancías.
Se encuentran en los puestos de mando, en taquillas de servicios, estaciones de ferrocarril y autobuses. Dentro de los autobuses también hay cámaras de video vigilancia.
En los aeropuertos hay miles de cámaras que lo vigilan todo.
Al tratarse de prácticamente pequeñas ciudades, fueron los aeropuertos una de las primeras estructuras en adoptar estos sistemas.
Hay cámaras dentro y fuera de los edificios, en el interior de los ascensores, en los controles de acceso, en los puestos de recepción, en los muelles de carga y descarga y en un largo etcétera.
Presentan estos sistemas altas ventajas a nivel judicial por los motivos descritos. Todos aquellos hechos ocurridos de modo fortuito son grabados al instante.
Y también proporcionan una gran ventaja en la prevención de sucesos. El simple hecho de que sean visibles estos dispositivos disuade en un porcentaje muy alto de cometer actos deliberados y por tanto evitables.